Por: Oscar Sánchez
@El_Voice
Fotos: Liliana Estrada
Cada vez es más frecuente organizar y armar un festival en México. Grandes propuestas musicales nacionales e internacionales nos invaden cada año y por supuesto el público sabe cómo está la onda y lo agradece.
Sin embargo, no podemos medir las experiencias positivas igual. Es cierto que cada vez es más frecuente pasarla chido dentro de un festival de música, sin embargo, estas experiencias dependen de un arduo trabajo y por supuesto de los pequeños detalles.
Es ahí donde podemos hablar de Vans, que cada vez más se preocupa por trabajar en esos detalles que hacen de la vida algo especial.
Vans aplica – sin querer o queriendo- la máxima; “de la unión hace la fuerza” y se aplican para que la banda se lleve algo más que una buena fiesta, se lleven una experiencia, un recuerdo tangible y algo que presumir dentro de su historia de vida.
Ceremonia 2016 contó con el escenario Vans “Off The Wall” y ahí se vieron desfilar talentos como Marineros, Jesse Baez, C. Tangana, Thudercat, Titán, NAS y Z-Trip. Bandas caracterizadas por su frescura, desparpajo y falta de respeto a las reglas convencionales, esto sin duda el público lo agradece con creces.
Sin embargo, no todo queda ahí, Vans anduvo rolando por cada rincón y para prueba el Vans Shaken Waffle Mix, un juego mecánico alucinante que hacía del cuerpo un licuado de emociones y gritos. La adrenalina no podía encontrar mejor lugar para explotar.
Durante todo el día se veían filas y filas tratando de vivir esta experiencia, caras serias y nerviosas abordaban tan atrevido juego; sonrisas y ojos explosivos se observaban al bajar del mismo y para finalizar, los atrevidos pudieron llevarse su fotografía. ¡Si vivieron la experiencia, felicidades!
Estar al tiro con eso de la moda, siempre es un motivo de buen humor y para la banda que se preocupa por tener lo último de la marca, había venta de mercancía oficial, única e irrepetible.
Sin duda Vans es una marca que se encuentra en el gusto del público y poco a poco se encarga de cubrir las necesidades que la banda necesita, la experiencia ya no es sólo ir a escuchar música, sino construir recuerdos y por supuesto plasmarlos de por vida.