Por Ariel Rodríguez “Brit”
Fotos Cortesía de Zepeda Bros./ José Luis Ramos
Tras dos años de ausencia Dream Theater regresó al Ciudad de México para presentar The Astonishing, su decimotercer disco, el cual está dividido en dos actos y de esa misma forma fue dividido el concierto.
Cabe destacar que para esta presentación se pusieron butacas en el Pepsi Center y por orden de la banda se prohibió estrictamente el uso de dispositivos celulares para tomar fotos y videos.
En punto de las 21:00 horas las luces del lugar se apagaron para dar paso a John Petrucci, James LaBrie, Jordan Rudess, Mike Mangini y John Myung quienes tomaron el escenario y dieron rienda a un extenso concierto que sin duda dejó satisfechos a los sus fans.
Los grandiosos riffs de Petrucci eran acompañados por imágenes futuristas proyectadas en cinco grandes pantallas en el fondo del escenario que resaltaban las canciones que conforman The Astonishing.
El concierto inició con “Descent of the NOMACS” justo como su última producción y de esa misma forma prosiguió la presentación, interpretando canción tras canción justo como en el disco.
El show se fue fluido sin pausas largas entre las canciones, dando paso a las imágenes y las entradas de cada una. La mayor pausa se dio entre los dos actos donde se dieron 15 minutos para que los fanáticos de la banda fueran por más chelas y vaciaran las ya bebidas.
Un recital en el que hubo poca interacción con el público, algún saludo del vocalista James LaBrie o alguna señal realizada por John Petrucci, más bien se dedicaron a interpretar las canciones que conforman los dos actos del The Astonishing.
Por casi tres horas Dream Theater hizo suyo el Pepsi Center, tocando en su totalidad su última producción que hizo vibrar a sus fans que gritaron y disfrutaron con cada canción interpretada.