Por: César Augusto López
Fotos: OCESA / Liliana Estrada
Ayer 3 de agosto, inició la primera fecha de los conciertos de Café Tacvba en el Auditorio Nacional con sold out.
Todo indicaba que sería una noche de aquellas que son difíciles de olvidar y así fue; después de dos intentos de “tercera llamada”, no llegaba el “comenzamos”; al parecer, porque parte del público aún se encontraba en la fila para ingresar al inmueble, pero después de estos intentos fallidos, por fin fue el inicio de una noche mágica en donde se oían los primeros acordes de “María”, que fueron suficientes para que los asistentes gritaran de emoción.
En un recorrido de sus grandes éxitos, las “canciones viejitas”, como mencionó Rubén Albarrán, quien en todo momento agradeció a los asistentes con su famosa frase: “gracias muchachos” y si, fue una noche de grandes éxitos, “El Metro”, “El Ciclón” y “Bar Tacvba”, encaminaron la ruta para cuando tocaron “Las Flores”, tema en el que todos nos pusimos de pie para corear y cantar; la vibra en ese momento fue espectacular y esto se incrementó cuando en el escenario salió la banda oaxaqueña “Los Bronces” para acompañarlos en el escenario con algunos temas como “La Muerte Chiquita”, “Olita de Altamar”, y «Futuro» con un toque al final de «No hay nadie como tú» de Calle 13.
Así, los éxitos seguían y ya acompañados con una orquesta completa, interpretaron “Las Batallas” y sin dar tiempo para respirar se siguieron con” Rarotonga”. Los Tacubos dieron todo en el escenario, pero algo que debemos destacar fue el increíble comportamiento del público como respuesta ante la espectacular velada, siempre cantando, siempre bailando. fue el complemento perfecto, la interacción entre los artistas y sus fans presentes y no podía ser para menos; sobre el escenario sonaban puros hits; banda, orquesta, cambió de vestuario, los temas más emblemáticos de la «Chilanga banda», «El puñal». Para el encore, sonó «Espacio » y entre canción y canción, se pedía «El baile y el salón», track con el que finalmente y después de interpretar 27 temas, con más de dos horas de música, es como cerraban la noche. Una velada inolvidable.