Por: Amaury Berdejo
Fotos: OCESA / Santiago Covarrubias – Pablo Deyta
Anastasia, el Musical de Broadway, ha llegado finalmente a la Ciudad de México para deleitar al público con una puesta en escena llena de emoción y esplendor. El Teatro Telcel se ha convertido en el escenario perfecto para revivir la leyenda de la familia Romanov y sumergirse en una historia llena de romance y tragedia que cautiva a todas las generaciones.
Tras varias actividades destinadas a la prensa mexicana, donde pudimos presenciar la obra completa antes de su estreno y al día siguiente charlar brevemente con los integrantes del elenco, pudimos percatarnos de inmediato que Anastasia es una de las obras de teatro más ambiciosas de los últimos años y el público mexicano está ávido por disfrutarla.
El montaje nos traslada a la época Zarista y a la Revolución Rusa, presentando el escape de una pareja enamorada hacia los alegres años veinte en París. La ambientación recrea con detalle los Palacios de Invierno y el Yusúpov de San Petersburgo, así como la emblemática Torre Eiffel y el Club Nevá en París. Cada escena es un desfile apoteótico de vestuario de época que sumerge al público en una experiencia visual impresionante.
El estreno de Anastasia ha sido uno de los eventos más esperados de la temporada teatral en México y ha reunido a grandes celebridades y personalidades del medio artístico y teatral. La obra ha sido aclamada por su calidad de producción, el talento actoral y la forma magistral en que se crea el contexto histórico.
La compañía está encabezada por destacados actores como Mariana Dávila y Javier Manente, Irasema Terrazas, Carlos Quezada, Gloria Toba y Manuel Corta, quienes han llevado a la audiencia en un viaje emocional inolvidable a través de las canciones más impresionantes de la obra, como «Una Vez En Diciembre», «París Te Abrirá El Corazón» y «Viaje Tiempo Atrás».
El Musical de Broadway cuenta con una impresionante producción escénica, incluyendo una pantalla gigante de alta definición que crea ilusiones escénicas fascinantes. Además, podemos disfrutar de un fragmento de El Lago de los Cisnes dentro de la trama, una referencia que nos remite al contexto cultural de la Rusia imperial.