Nota por: Alicia Ávila

Este fin de semana, Sam y Marx, lanza su primer LP de fina factura y amplias miras, constituye una colección de canciones que repasan ansiedades, inseguridades y otros lugares incómodos.

Samuel Márquez es la cara detrás de este proyecto en el que el cantautor y multinstrumentista, originario de Chihuahua, regresa de un largo viaje a casa, para darle forma al proyecto de vida que trae en manos; el más importante al día de hoy en su carrera. Samuel anteriormente, colaboró como baterista con artistas como Ruzzi y Robert Dobbs antes de regresar a su tierra natal.

Después de lanzar durante estas últimas semanas los temas ‘¡No Hablas!’, ‘31000’ (Treinta y uno cero cero cero) y ‘Pensé’, es cuando llega este material debut, un álbum lleno de colores intentando matizarlos a través del mundo entero.

Esta producción tiene tintes de pop fusionados con electro pop con saxofón y atmósferas de bajos remarcados con un cierto aire funk que nos lleva a los años ochenta en un ambiente de tradición del soft rock mexicano.

«El disco de Sam y Marx me ha mostrado esa parte de mí que no conocía: la inminente necesidad de expresar emociones y sentimientos profundos a través de la música. Algo que estuvo por mucho tiempo dormido. Atravesar el miedo y despertar reconociendo mis pensamientos e ilusiones, ha desencadenado en mí el deseo de seguir creando música y hablar de esas cosas que antes sólo se quedaban en mi cabeza»

‘Luna’ está pronto por dar a conocer el videoclip que lo acompaña, tema que marcó el inició de la historia de este proyecto.