Por: Christian Espino C. “James “
Fotos por: Hobbit
El pasado fin de semana en las instalaciones del pabellón cuervo se llevó la tercera edición del Festival Non Stop Ska, que en esta ocasión cambio de instalaciones pues en años anteriores se había realizado en el Palacio de los Deportes, lo cual fue la mejor decisión pues ahora sólo había un escenario para que los asistentes pudieran disfrutar del concierto y de las instalaciones.
Para comenzar el festival se proyectó el documental que se estrenó este año, Pick It Up, que retrata como fue el ska en la década de los 90’s, que mejor forma de dar la bienvenida al público que hasta habido por comenzar la fiesta desde temprano, por parte de las música los primeros acordes los imprimió New Lion Ska quienes de forma automática puso a bailar a toda la banda que iba llegando poco a poco.
La calidad del cartel desde su lanzamiento estaba garantizada, Módulo Ghetto y Jamaica 69 fueron la muestra del buena clase de música que se está haciendo en la actualidad.
Una de las constantes que hubo durante los dos días del Festival fueron las fallas de sonido, que por obvias razones, hizo que las presentaciones de las bandas como Inspecter 7 sufrieran las consecuencias, aunque los norteamericanos no dejaron de dar su máximo esfuerzo y el público agradecido se los reconoció bailando y coreando sus rolas como “The Infamous y The Popeye”.
Llegó la hora de que los dueños del balón y que juegan como locales Out Of Control Army, salieran en modo orquesta con veinte músicos a escena, para demostrar que su proyectó cada vez se va consolidando y pueden hacer mezclas del ska y jazz, sonidos que nunca han estado peleados y dan como resultado muy buenas rolas.
A pesar de que los ingenieros de sonido hicieron todo lo posible por solucionar los problemas con los Out Control también se notaron las fallas, pero la mejor ovación se la llevaron cuando invitaron a subir al escenario a los coreanos Kingston Rudieska para interpretar «Night Boat to Cairo» de los Madness.
Una de las bandas mas esperadas por el publico, son los argentinos Satélite Kingston, que si no mal recuerdo esta es su primer visita a nuestro país, así cumpliendo el sueño de muchos de ver a una de las más grandes bandas del Cono Sur, la locura del baile comenzó al sonar las primeras notas de “Locura de Octubre», no cabe duda que bien valió la espera pues tocaron muchos de sus éxitos como “Mensajes, Dormir al sol y El Enemigo», amenazaron con volver sólo esperamos que no sea tan larga la espera para volver a verlos en los escenarios mexicanos.
El siguiente turno al bate como dijeran en el béisbol fue para los rusos, Lollypop Lorry, quien para ellos era la primera era vez en nuestro país y se llevaron un gran sabor de boca al ver el recibimiento del público del Non Stop Ska, Svetlana y compañía nunca dudaron en dar lo que podría ser uno de sus mejores presentaciones de la pequeña gira que darán en nuestro país.
Vienen promoviendo su más reciente material llamado Ural Station del cual tocaron «Moscow Ska Festival», pero para rendir homenaje a México le cambiaron el nombre a «México Ska Festival», además también interpretaron un clásico del ska nacional «Jamaica Ska», y dedicaron al público “Mi chico Lollypop”.
Llegaba el momento de bailar de forma más intensa y lanzar unos cuantos golpes, Mephiskapheles fue la banda ideal para eso, además para ellos también fue la primera vez en México, fue una presentación increíble llena de energía y grandes sonidos , fue a la única banda del día donde volaron los vasos llenos de cerveza de toda la intensidad que se vivió.
La mejor forma de terminar el día fue con Western Stardard Time Ska Orchestra para bailar con el sonido original del ska jamaiquino, ver la ejecución de los casi veinte músicos en el escenario con tal precisión es un verdadero deleite, además interpretaron la canción que sería la más covereada del Festival Jamaica Ska.
No cabe duda que el público salió satisfecho del primer día y el único mal sabor de boca fue el audio que se vio mejorado al final de la noche.