Por: Amaury Berdejo
Fotos: OCESA / Liliana Estrada

La noche del miércoles 9 de marzo, nos dimos cita para presenciar el arranque de la gira de Moderatto en el Auditorio Nacional.

Al entrar al recinto, por los altavoces se anunciaba la remodelación más reciente del Auditorio, que ahora cuenta con nuevas pantallas, butacas y un sistema de luces de talla internacional, que aseguran que en adelante los eventos que ahí tengan lugar estarán provistos de una gran tecnología enfocada en el espectáculo.

La velada empezó con la aparición de Jay de la Cueva, sin duda uno de los mejores frontman de México, en un vestido de novia y con la marcha nupcial de fondo, lo que provocó el grito de todos sus fans. El show arrancó con la coreada “Muriendo Lento”, que al terminar dio paso inmediato a “Zodiaco” y “Me Caes Perfecto”.

Cambiando de vestuario prácticamente cada tercera canción, Jay y su banda dieron una muestra no sólo de talento y producción audiovisual, sino de un verdadero compromiso con ofrecer un show entregado a su público.

La primera invitada de la noche fue la cantante Camila, quien hizo un dueto con la banda para interpretar la canción “Un Poco de Tu Amor”, conocida por ser parte del soundtrack de la telenovela Rebelde.

Posteriormente subió al escenario Renee, cantante independiente que ha escalado posiciones en la escena indie durante los últimos meses para darse a conocer, interpretando con mucha energía la canción “Aún Hay Algo de Amor”, mostrando al final del tema su paliacate verde, símbolo del movimiento feminista.

Luego fue el turno del rapero mexicano Asesino y la cantante peruana Nicole para hacer una colaboración y cantar “Ser o Parecer”. Al final de este tema, Asesino hizo gala de su talento y prendió al público con sus rimas y referencias al poder de la cultura mexicana y al día de la mujer.

Llegó el momento de escuchar “Mil Demonios”, que originalmente estaba planeada para ser un dueto con Danna Paola, pero Jay de la Cueva explicó que un par de días atrás su abuela había fallecido, por lo que le dedicó esta canción y toda la energía del lugar a su amiga y su familia.

La noche llegó a su clímax con las interpretaciones de “Amor Prohibido” y posteriormente la aparición de Wendy, quien recitó un poema en el marco del mes de la mujer, que hablaba del empoderamiento femenino y la urgencia de detener los feminicidios en México, esta parte culminó con el electrizante grito de todo el Auditorio Nacional a la voz de: ¡Hoy, ni una más!

La banda cerró con broche de oro con las canciones “Ya lo Veía Venir”, “Quemándome de Amor” y “Gracias”, haciendo gala de los lanzallamas, el confeti y las serpentinas que guardaban para la parte final de este emotivo show.

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