Por:Amaury Berdejo
Fotos: OCESA / Laura Villegas

El esperado regreso de Los Dynamite a los escenarios finalmente se hizo realidad, y el Teatro Metropólitan fue testigo de una noche llena de recuerdos y de propuestas nuevas el pasado sábado 27 de mayo.

La banda originaria de la Ciudad de México, que se presentó en su regreso oficial en el festival Vive Latino, llenó el recinto con los fans que crecieron con sus canciones, así como nuevos adeptos interesados en la música de esta banda de culto en la ciudad.

A pesar de la lluvia que se dejó sentir en la Ciudad de México, los fans de Los Dynamite llegaron al Teatro Metropólitan, listos para celebrar con Diego Solórzano, líder del proyecto y la alineación actual de la banda.

Puntuales, iniciado su show poco después de las 8:30 p.m. arrancando con «1990» y «Ready Ready». Una canción tras otra, el setlist revisitó (como se esperaba) la época dorada del indie mexicano y el emblemático disco Greatest Hits, que conquistó a una generación de escuchas y bastó para atesorar en el ideario a esta banda mexicana.

Destacamos la potencia e interpretación de Sebastián Farrugia en la batería, cuyo sonido es crucial tanto en Los Dynamite como en el proyecto posterior de Diego Solórzano, Rey Pila. Simplemente una maravilla apreciar la técnica de este gran músico.

Con el tema «No me sueltes», Los Dynamite dedicaron unas palabras de agradecimiento a sus seguidores, y continuaron con «24» donde invitaron al legendario Paco Huidobro, quien fue el productor de ese único e icónico disco de la banda,»Katatonic»,»Fila 14″ y «Visions» siguieron con el enérgico recuerdo de nuestras adolescencias.

«Hold on» y «No me sueltes» fueron puntos de ascenso que culminaron con el cover «Lithium» de Nirvana, una sorpresa que emocionó a todos los asistentes, donde además hay que remarcar la calidad de este tributo y la buena ejecución, sin duda un momento para el recuerdo.

Diego Solórzano, vocalista de la banda, saludó al público y recordó con nostalgia los años del Pasagüero, dedicando a este bar y a los fans más antiguos la canción «No me sueltes», que resonó de manera espectacular en vivo.

Estaban presentes todos los que tenían que estar, cientos de personas que atesoran este recuerdo y que están abiertos a conocer la nueva música de Los Dynamite, en un momento donde las bandas se reencuentran constantemente, alimentadas por la nostalgia de un público siempre ávido de música.

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