Por: Paulina Sánchez
Fotos: OCESA / César Vicuña
El Foro Puebla vivió el Halloween de una manera especial con la vibra oscura y tenebrosa de las Victimas del Doctor Cerebro, que por 35 años ha sido su sello característico. “¡Bienvenidos a su restaurante La Luciérnaga Viva!”, lanzó Ricardo “Abulón” para interpretar “Guayaba”. Así comenzaba una noche peculiar y vibrante.
Entre destellos que simulaban la niebla de un panteón, Jesús “Chipo” (metales, teclados y voz), Abulón (voz y guitarra), Arturo “Tuco” (bajo), Daniel “Ranas” (guitarra), Julián André Toussaint (batería) y Carlos (guitarra) ocuparon sus lugares, acompañados por dos bailarinas con atuendos de látex al estilo dominatrix que dieron un aire provocador a la escena.
La primera parte del concierto estuvo dedicada a celebrar su álbum homónimo de 1993, un disco que, a pesar de ser esencial en su historia, nunca habían tocado completo en vivo. Desde los primeros acordes, el público respondió con euforia. Ranas, fiel a su estilo, se lanzó al público para surfear entre brazos levantados, mientras el recinto se iluminaba con la luz de cientos de celulares durante “Ya Tus Amigos”. A mitad del tema, Abulón bajó del escenario para mezclarse con la gente y subir a la parte alta del lugar.
El cierre fue tan explosivo como se esperaba: pirotecnia, caos y energía pura. La banda se despidió con “El Esqueleto”, mientras Toussaint y Tuco cargaban a Chipo, y Abulón incitaba al público para armar un poderoso slam.
Una velada frenética, entre nostalgia, humor negro y la teatralidad característica de Víctimas del Doctor Cerebro, que una vez más demostraron que su locura sigue más viva que nunca.
