Por: Óscar Quintero
Fotos: Daniel Rodíguez
El 18 de septiembre no será una noche cualquiera en la Ciudad de México. El Palacio de los Deportes, recinto emblemático que ha sido testigo de momentos históricos de la música, abrirá sus puertas para un estreno sin precedentes: Esteman y Daniela Spalla compartirán escenario por primera vez en este coloso, y lo harán con un espectáculo que promete ser mucho más que un concierto: una obra teatral en clave pop, un viaje sonoro y visual que llevará al público por los matices del amor, el deseo, el desamor… y la complicidad perfecta.
Amorío, el disco que une a estos dos artistas, no es solo una colaboración; es el reflejo de una conexión artística genuina que ha encontrado su punto más alto en esta gira. La química entre ambos no se actúa, se siente. Y sobre el escenario se traduce en una propuesta escénica cargada de simbolismos, emociones y una estética donde el blanco, el negro y el rojo no solo son colores, sino estados de ánimo que se irán revelando canción tras canción.
Una obra en vivo… con final inesperado
Con un concepto visual cuidado al detalle y una narrativa que atraviesa cada bloque del show, Esteman y Daniela Spalla prometen un espectáculo contundente, íntimo y expansivo al mismo tiempo. Será como sumergirse en una telenovela moderna: hay amor, hay conflicto, hay pasión… pero también hay música con alma.
“Queremos que la gente se sienta dentro de la historia”, han dicho. Y esa historia estará contada con coreografías, cambios de vestuario, iluminación teatral y, sobre todo, canciones que ya han conquistado corazones en plataformas y escenarios de toda América Latina.
Del estudio al escenario: el poder de la conexión
El proyecto Amorío nació de una colaboración que se volvió amistad y de una amistad que se volvió arte. La forma en la que Esteman y Spalla se complementan no solo define el sonido del álbum, sino que ha dado pie a un espectáculo pensado para tocar cada fibra del espectador.
Las transiciones dentro del show han sido diseñadas para sorprender: cada canción tiene un nuevo rostro, una nueva interpretación, un nuevo universo. Como si cada momento del concierto fuera un capítulo diferente, con sus giros dramáticos y sus explosiones de alegría.
Una noche histórica que no puedes perderte
Ambos artistas han dicho estar “emocionadísimos” por presentarse en el Palacio de los Deportes. No es para menos: es la primera vez que lo hacen y lo harán con un espectáculo a la altura del recinto y del público mexicano. Y si algo ha demostrado esta dupla, es que no dejan nada al azar. Cada nota, cada visual, cada palabra ha sido construida con dedicación, amor y una estética que derrocha elegancia y energía.
El 18 de septiembre, el Palacio será testigo de un evento que, sin duda, marcará un antes y un después en la carrera de ambos. Un concierto que no solo se verá y se oirá… se vivirá.
Si aún no tienes tus boletos, corre a Ticketmaster, porque esta historia de amor merece ser vivida en primera fila.