Fotos cortesía Lulu Urdapilleta
El día de ayer Natalia Lafourcade se presentó para lo que ella fue su primer Auditorio Nacional, aunque más tarde recordó ante el público que ya era la segunda, puesto que hace algunos años le abrió a Juanes en alguna presentación que tuvo.
Conforma la noche avanzaba el Auditorio iba cobrando vida para que alrededor de las 9 pm se diera la tercera llamada para iniciar el que a mi parecer ha sido el mejor show que ha ofrecido Natalia.
Con un tema que me hiciera recordar a Lola Beltrán, Cucurrucucu Paloma empezó a sonar en voz de Natalia Lafourcade en el Auditorio para beneplácito de los asistentes, canción que todos aplaudieron, mientras que la cantante se emocionaba con las primeras estrofas de la canción.
Enfundada en un conjunto negro y un “chal” del mismo tono y con unas rosas rojas como únicos motivos, Lafourcade comenzó su siguiente canción, Vámonos Negrito, ahora si acompañada de su banda, para después seguir con Antes de Huir.
“Que vivan las raíces, el origen…¡Que viva México!” fueron las palabras que dijo Natalia antes de entonar “Hasta la raíz”, canción que da nombre a su última producción discográfica y que fue la más coreada durante el recital. Lo que construimos, Palomas Blancas y Para que sufrir, fueron los temas que antecedieron la actuación de los invitados de honor, Los Cojolites, un grupo veracruzano que se ha presentado ya en varias ocasiones en el DF y que es bastante recomendable, con ellos interpreto Un Derecho de Nacimiento, para posteriormente dejarles el escenario.
Con el Sol Sin Fin, los veracruzanos dieron gala de su maestría y colorido musical, mientras que para su tercer canción comentaron que ya que Natalia los había invitado a cantar una de sus canciones con ellos, ahora ella debía cantar una canción de Los Cojolites y la elegida fue Sembrando Flores, que dio fin a la participación de la agrupación.
Ya no te puedo querer marco el regreso de la banda de Natalia al escenario, para después interpretar Nunca es Suficiente y Mujer Divina.
Poco después Natalia recordó el tributo que realizo algunos años atrás al “Flaco de Oro” Agustín Lara, con Amor de mis amores, canción con la que invito a algunos asistentes para que subieran al escenario y cantaran con ella, así que personas de todas las edades pudieron estar de cerca con ella y cantar, aunque no aprovecharon para tomar su “selfie”, cosa que dificulto un poco la interpretación, que concluyó con un abrazo grupal de los afortunados.
Llego el turno de escuchar Amarte Duele, canción que fue muy bien aceptada y que también marco un gran momento para Natalia, siguió Un Pato y con En el 2000, recordó sus inicios.
Siguieron más temas, Me voy de casa, Te quiero ver y Mi Lugar Favorito retumbaron el inmueble, para después tocar Limosna, otro tributo a Agustín Lara con Aventurera y cerró parcialmente la noche con Ella es bonita, mientras presentaba a los integrantes de la banda, para desaparecer un tiempo del escenario, por lo cual los asistentes vitoreaban su nombre para que volviera.
Y lo hizo con Partir de mí, uno de los tres temas que quedaron fuera del disco Hasta la raíz, pero que ya están incluidos en una edición especial del mismo, Estoy lista y No más Llorar fueron las que precedieron a Azul con la cual cerro una increíble noche, no sin antes agradecer a su público.
GALERÍA FOTOGRÁFICA CORTESÍA LULU URDAPILLETA