Por: Daniela F.

El jueves 17 de enero en el Teatro Metropólitan, se llevó a cabo la primera presentación de las tres planeadas este fin de semana por Molotov, como parte de su gira “El Desconecte” (Mtv Unplugged).

Era una noche fría, pero eso no fue impedimento para que los seguidores asistieran puntualmente a su cita.

La canción para dar inició al concierto fue “Here We Kum”, una parte del público ya se notaba emocionada, mientras que algunos otros apenas estaban ocupando sus lugares. La segunda canción fue “Amateur (Rock Me Amadeus)”. Al termino de esta canción se escuchó una voz entre publico que grito “Tito te amo”, a la cual Tito Fuentes respondió “Yo también te amo”, lo cual generó risas entre los presentes.

Para la cuarta canción Micky Huidobro comentó “A ver si con está ya se paran”, entonces empezó a sonar “Chinga tu madre”, de inmediato todos en el Metropólitan se pusieron de pie, empezaron a cantar y brincar ese gran clásico de la banda.

Se notaba un gran ambiente entre Tito, Randy Paco, Micky y los músicos invitados, tanto así que de pronto entre tanto bromear en la canción “Oleré y oleré y oleré el UHU”, Tito olvidó la letra y por un par de segundos soló se escuchaban los instrumentos musicales.

Para “Frijolero”, “Voto Latino”, “Más vale Cholo”, “Cerdo” y “Marciano”, invitaron a personas del público a sentarse a lado de Micky, algunos cantaron, otros bailaron y otros simplemente disfrutaron de esa oportunidad de ser parte del show.

No cabe duda de que Molotov tiene la receta perfecta para que cada una de sus presentaciones sea ejemplar, divertida y todos los asistentes disfruten al máximo del espectáculo. En pocas palabras, que cada peso invertido en los boletos vale mucho la pena.

Molotov cerró con broche de oro el concierto, eligiendo dos emblemáticas canciones, la primera fue “Rastamandita”, está vez invitaron al escenario únicamente a mujeres del público. Realmente esto ya era una fiesta.

La última canción fue “Puto”, canción que no necesita presentación y explicación, la cual provocó un clímax total, en el Metropólitan todos bailaban, cantaban, brincaban y disfrutaban.

Para finalizar se pude decir que, aunque no hubo un lleno total, la conexión entre Molotov y el público hicieron parecer que no había cupo para más y aun así hacer retumbar el Teatro Metropólitan.

 

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